Valle de Colchagua, la ruta del vino a 2 horas de Santiago
El Valle de Colchagua es uno de esos lugares que no pueden faltar en tu bitácora si quieres disfrutar de lo mejor de Chile. Su tradición viticultora lo ha convertido en un destino con una variada oferta hotelera, gastronómica y con actividades de lujo.
Así que, si estás de vacaciones en Santiago, es una oportunidad imperdible para hacer enoturismo y conocer uno de los valles con mayor prestigio del país.
Ya que está a solo dos horas de la capital, es la escapada perfecta: llegas temprano en la mañana, recorres la zona, te hospedas en uno de sus hoteles y al día siguiente estás de regreso en la urbe.
¿Te animas? Sigue con nosotros, porque te contaremos todo lo que puedes hacer en el Valle de Colchagua para vivir una experiencia inolvidable.
Valle de Colchagua: un destino ideal
El Valle de Colchagua es una de las zonas vitivinícolas más importantes de Chile. Se encuentra en la región de O’Higgins, a solo dos horas de Santiago.
Se trata de un valle largo y estrecho que inicia a los pies de la Cordillera de los Andes y se extiende hasta el Océano Pacífico, abarcando las ciudades de San Fernando y Santa Cruz.
Su mayor atractivo son las más de 200 bodegas que producen una amplia variedad de vinos. En tu recorrido, tendrás la oportunidad de probar vinos tintos y blancos tradicionales: Cabernet Sauvignon, Carmenere, Merlot, Sauvignon Blanc y Chardonnay, entre otras uvas.
Todos de un sabor inigualable, es que aquí cada gota pasa por elevados estándares de calidad.
Los mejores vinos del Valle de Colchagua han hecho que este sea uno de los principales destinos del país. Según datos del Servicio Nacional de Turismo, en temporada se reporta el 93 % de ocupación hotelera. Así que, si decides viajar en temporada alta, es mejor que reserves con anticipación.
¿Qué ver y hacer en el Valle de Colchagua?
Un paisaje hermoso y una historia vinculada al pueblo mapuche hacen de esta región vitivinícola un lugar increíble para descubrir. Una vez que estás en el Valle de Colchagua, el plan es aprovechar el tiempo al máximo para que no te pierdas de nada.
Aquí te dejamos algunas de las actividades que forman parte de la ruta y que harán que te enamores de esta región enclavada en el corazón de Chile:
Conoce los viñedos y bodegas
Como ya lo mencionamos, en el valle hay más de 200 viñedos y bodegas. Imagina tener la oportunidad de degustar el mejor vino observando las plantaciones de uvas que hicieron posible que sostengas una copa en tu mano, ¡es una experiencia única!
En las viñas de Colchagua, saben muy bien que el turismo es importante para la región y se destacan con los tours. La verdad es que uno es mejor que otro, ofrecen degustaciones y actividades al aire libre.
Imagina pasear por las rutas del vino en un carruaje antiguo, degustar vinos bajo la luz de las estrellas o hacer un picnic, entre otras actividades. Este es el lugar de lo posible.
No te pierdas las cabalgatas
Recorrer Colchagua a caballo es una de las actividades favoritas de los turistas. Te transporta al Chile antiguo y te conecta con las tradiciones del campo.
Es una excelente manera de conocer los distintos senderos y valles. Solo tienes que contactar con los operadores turísticos para que te asignen un guía y vivas la región con una experiencia diferente.
Se trata de una actividad que viene bien si viajas con tu familia, amigos o en pareja.
Visita las ferias de artesanía
El Valle de Colchagua no solo es vino, su gente tiene un extraordinario talento para fabricar canastos de mimbre, piezas de cuero, tejidos de lana de oveja, objetos de barro marchiguano, preparaciones gastronómicas, entre otros.
En las distintas paradas y puntos turísticos, encontrarás ferias y tiendas de artesanos ideales para conectar con la identidad de la región, apoyar la economía local y conseguir artesanías de todo tipo.
Descubre el patrimonio cultural
El Museo de Colchagua, ubicado en Santa Cruz, es un lugar que alberga al patrimonio cultural de la zona, con objetos de exhibición de trascendencia histórica que te llevará a un viaje por el origen de los chilenos.
¡Fósiles, restos arqueológicos, objetos prehistóricos y más! Todo eso podrás ver en el museo, que tiene un tiempo estimado de visita de 3 horas.
El horario es de 10:00 a 18:30 y las entradas cuestan 7.000 pesos chilenos (un poco menos de USD 8). Hay descuento para mayores de 60 (4.000 pesos – USD 4,5), y menores estudiantes (3.000 pesos – USD 3,3). No necesitas reserva previa.
Luego, puedes seguir por la ruta I-72 hasta el Museo del Vino, ubicado a media hora de Santa Cruz. Aquí las salas son temáticas, todas relacionadas con el vino, su evolución e importancia para los chilenos.
Descubrirás cómo se fabrican los corchos y botellas, conocerás de los aromas del vino y todo lo relacionado con esta bebida.
Ubicado justo al lado se encuentra el Museo del Automóvil, que contiene más de 100 ejemplares de motocicletas y automóviles que van desde el año 1890 a fines del siglo XX.
Estos museos abren de martes a sábado, desde las 10:00 a 18:30.
A diferencia del Museo de Colchagua, aquí sí debes reservar con anticipación. Los valores son de 17.000 pesos (USD 19) para adultos, 15.000 (USD 16,5) para mayores de 60 años y 10.000 para menores de 5 a 17 (USD 11).
La entrada incluye el acceso a ambos museos y una copa de vino para acompañar el recorrido.
Lo que debes saber antes de visitarlo
¿Dónde se encuentra el Valle de Colchagua? Este rincón de Chile está a 180 kilómetros de Santiago. Así que, si vas en auto, estás a solo dos horas de camino. También puedes llegar en autobús o tren.
Si viajas en auto a Santa Cruz, Colchagua, la recomendación es tomar la ruta 5 Sur hasta San Fernando y de allí hacia Santa Cruz por la ruta 90. Mientras que si te trasladas en autobús, considera que el trayecto durará unos 30 minutos más.
Antes de organizar tu viaje a Chile, considera que la temperatura media de la región es de 15 grados centígrados. Los veranos son secos y los inviernos lluviosos.
Toma en cuenta que, como la mayoría de las actividades son al aire libre, es recomendable llevar ropa cómoda para caminar y zapatos de senderismo.
Otro punto importante es la oferta hotelera y gastronómica. Hay hoteles para todos los gustos, desde los más económicos hasta los más lujosos. Igual los restaurantes, en los que puedes degustar platos chilenos e internacionales.
¿Preparado para conocer el valle?
Ahora que ya sabes qué visitar en el Valle de Colchagua, es momento de empezar a planificar tu escapada. En nuestro ebook 10 consejos para preparar el viaje de tus sueños te contamos los mejores tips para disfrutar de las vacaciones al máximo.