Ruta del vino en Mendoza: ¿se puede ir en invierno?
La provincia de Mendoza se destaca por sus paisajes impresionantes y una cultura enológica vibrante. En esta joya de Argentina, la ruta del vino en invierno ofrece una experiencia inigualable para los viajeros aficionados que desean renovar o complementar sus conocimientos acerca de la bebida de Dionisio.
Famosa a nivel internacional en virtud de su gran cantidad de bodegas y viñedos, Argentina cuenta con las rutas de vino, paseos entretenidos y dirigidos a las personas que desean conocer más acerca del universo maravilloso y sofisticado de la enología. ¡Tanto es así que atrae a turistas de todas partes del globo con el afán de probar sus productos con excelente calidad!
Entre los destinos más buscados, encontramos Mendoza, una ciudad ubicada en la región de Cuyo muy popular por producir los mejores vinos y contar con la mayor cantidad de bodegas en el territorio argentino.
¡Descubre más sobre esta ruta del vino en Mendoza durante los meses más fríos del año de la mano de SKY!
El encanto del vino en invierno: descubre la Ruta del Vino en Mendoza
La ruta del vino es unos de los tesoros más deseados en la tierra mendocina, principalmente en invierno, ya que la época invita a disfrutar de una buena copa solo, con amigos y/o con la familia.
En compañía de ciudades como Bordeaux en Francia, Melbourne en Australia y Florencia en Italia, Mendoza ostenta con orgullo su octavo lugar entre las capitales mundiales del vino.
Recorrer los viñedos y las prestigiosas bodegas de esta región es, sin duda, una experiencia encantadora. Y para disfrutarla al máximo, nada mejor que solicitar el apoyo de una agencia de turismo que inspire tu confianza. Estas empresas suelen ofrecer desde paseos a caballo, rutas en bicicleta hasta tranquilas caminatas guiadas.
Ruta del Vino en invierno: una experiencia fabulosa con múltiples actividades
Conocida como “La tierra del sol y del buen vino”, Mendoza cuenta con más de 1.200 bodegas siendo que la mayor parte acoge con gusto a sus visitantes para sumergirlos en la fascinante historia y en los procesos que rodean a esta sublime bebida.
A lo largo de la ruta del vino en invierno, tanto grandes como pequeñas empresas familiares ofrecen experiencias clásicas, como:
- Visitas guiadas;
- cursos de cata para disfrutar de los sabores más exquisitos;
- degustaciones especiales;
- participación en la mística vendimia, actividad que engloba recoger las uvas junto a los viticultores para la posterior producción de vino.
Sin embargo, ¡esto no es todo!
De la misma manera que avanzan otras áreas, la ruta del vino en Mendoza ha ganado nuevos aires en estos últimos años. Con la intención de impactar a los visitantes y generar emociones intensas, las empresas han diversificado sus propuestas y servicios.
Esto incluye desde la posibilidad de deleitarse con un almuerzo entre viñedos u hospedarse en un entorno mágico rodeado de vides, hasta la oportunidad de participar activamente en la cosecha, en la poda y en la creación de su propio vino personalizado.
Asimismo, los amantes del vino pueden nutrir su conocimiento con cursos de degustación de nivel avanzado y así, obtener una perspectiva más específica y actualizada sobre el tema.
Por si esto fuera poco, la ruta del vino en invierno también te da la posibilidad de relajarte al 100% en un spa del vino y disfrutar de la cosmética vitivinícola, una experiencia embriagadora para todos los sentidos.
Planifica tu visita a las bodegas en Mendoza en la época más fría del año
Si ya decidiste emprender la ruta del vino en invierno, te recomendamos tener en cuenta los siguientes 3 puntos a la hora de planificar tus visitas a las bodegas.
1. Organización por regiones
En Mendoza, existen 4 regiones vitivinícolas, cada una dividida en distritos: Mendoza Ciudad, Luján de Cuyo, Maipú y Valle de Uco.
Así, sugerimos que organices tu itinerario separando los paseos por regiones y, si es posible, por distritos. Esto te permitirá optimizar los traslados, ahorrando tiempo y dinero.
2. Cantidad de bodegas
Ten en cuenta la cantidad de bodegas que quieres visitar en un día.
Por ejemplo, si planeas disfrutar de un almuerzo en una bodega, lo recomendable es programar un máximo de dos visitas: una por la mañana (visita y degustación) y otra al medio día (visita con almuerzo y degustación).
Estos almuerzos suelen ser extensos, por lo que se necesita tiempo para disfrutar de la comida y del vino.
Lo ideal es aprovechar estas instancias y las visitas a pleno, pero, si tu idea es optimizar el viaje visitando la mayor cantidad posible de bodegas, puedes planear un almuerzo rápido. Esta medida te habilita a visitar hasta 3 bodegas en el día, sin inconvenientes en materia de horarios.
3. Reserva anticipada
Para visitar una bodega en Mendoza, es indispensable reservar con antelación.
Mientras algunas ofrecen opciones de reserva en línea, otras solicitan que el interesado se comunique a través de mensajes por correo electrónico o redes sociales, como WhatsApp e Instagram.
Si reservaste un almuerzo en una bodega, recomendamos que te comuniques con la empresa para evitar inconsistencias como una confusión en el horario agendado o cambios en la planificación del lugar.
Aguas termales: otra experiencia para disfrutar
Visitar Mendoza para recorrer la ruta del vino en invierno no solo ofrece la posibilidad de degustar bebidas espectaculares y conocer más sobre la industria vinícola, sino que también la oportunidad de disfrutar del agua mineralizada de los complejos termales de Los Molles, Cacheuta y El Challao. Esta es una combinación única y perfecta de relajación, aventura y, por supuesto, los mejores vinos del país.
Cacheuta
Ubicado estratégicamente a 38 km de Mendoza capital, este complejo cuenta con aguas termarles provenientes del deshielo de los Andes, en un entorno natural con piscinas y actividades de aventura.
Los Molles
Localizado a unos 50 km de Malargüe, Los Molles es un complejo termal que se destaca por su oferta de relajación y descanso, con infraestructura hotelera y acceso a través de la RN 40 y RP 222.
Termas de El Challao
A tan solo 7 minutos de la capital mendocina, este complejo termal se beneficia de un clima templado y seco durante todo el año. Además, permite explorar las ruinas del antiguo Hotel Termas El Sosneado, con aguas termales de origen volcánico y propiedades curativas.
Cada uno de estos complejos proporciona una experiencia energizante, combinando la belleza natural de la región con las beneficiosas propiedades de sus aguas termales.
¿Listo para explorar la ruta del vino en invierno?
En la provincia de Mendoza, el encanto de los paisajes nevados se combina con la calidez de las acogedoras bodegas creando así, la combinación perfecta para descubrir la magia de la cultura vinícola en su esplendor invernal.
Desde el placer de saborear vinos de excelencia hasta la posibilidad de realizar actividades al aire libre enmarcadas por majestuosas montañas, la ruta del vino en Mendoza es un verdadero deleite para los sentidos.
Así que, si quieres conocer más sobre el tema y descubrir los secretos mejor guardados de la tierra mendocina, ¡la ruta del vino en invierno es tu mejor opción!
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