7 consejos para ahorrar en comida durante un viaje

Cuando queremos viajar con poco dinero, uno de nuestros objetivos es ahorrar en comida. Este es uno de los principales gastos de todo viajero y, por suerte, podemos controlarlo para cuidar nuestro bolsillo durante días de relax y aventura.

Pero, ¿cómo hacerlo? ¡Ya lo descubrirás! Aquí te dejamos una lista de consejos prácticos y sencillos que te ayudarán mucho.

¡Empecemos!

1. Incluye desayunos (y otras comidas) en tu reserva de hospedaje

Además de volar en aerolíneas low cost y ser un “cazador” de ofertas, los viajeros tienen que ser muy inteligentes al reservar hotel si quieren proteger su dinero.

Y, si se trata de ahorrar en comida, una de las mejores opciones es hacer una reserva con desayuno incluido y, si es posible, otra (u otras) de las comidas del día.

Comprar cada plato por separado dentro del hotel será mucho más costoso que pagarlo dentro de un paquete general y con promociones especiales. 

2. Arrienda una cabaña con cocina

Si te gusta la cocina, ¿por qué separarte de ella mientras viajas? Al contrario, prepara tus propias comidas y, así, ¡ahorra muchísimo!

Cada vez son más los viajeros que prefieren rentar una cabaña en una ciudad o lugar vacacional para disfrutar con un presupuesto modesto.

En una casa o departamento equipado con cocina, podrás preparar deliciosas comidas durante tu estadía para que no tengas que gastar hasta 3 o 4 veces al día en restaurantes, cadenas de comida rápida y otros lugares parecidos.

Si viajas en grupo, ¡mucho mejor! De esta manera el gasto de los ingredientes y alimentos será compartido y será menor el peso para cada uno de los bolsillos.

A través de Airbnb, redes sociales y muchas páginas de Internet, puedes encontrar cabañas bonitas, acogedoras y a precios atractivos.

3. Come como un local

Si comes como un turista, gastarás como un turista. Si lo haces como un local, gastarás como un local. Es una ecuación muy sencilla, pero a veces la olvidamos.

Comidas en el hotel, platillos en restaurantes, postres en lugares exclusivos… Si esto se hace una constante en tus días de viaje, sin duda tendrás que invertir mucho dinero en tu disfrute.

En cambio, si comes como los locales de cada lugar, cocinando tu propia comida y con ingredientes propios de la región, ¡los costos bajarán tanto que tu bolsillo te lo agradecerá!

Una persona que no está de viaje y disfrute, sino en su rutina, siempre intentará ser ahorradora al comer, comprando ingredientes locales, evitando los lujos y yendo a los supermercados y mercados más baratos y convenientes.

Por eso, habla con un local y, ¡copia su forma de comer!

Además, esto resulta mucho más saludable, ya que puedes ver por ti mism@ la calidad de los alimentos y evitarás la comida rápida.

4. Lleva snacks para cada recorrido 

Museos, cumbres, plazas, montañas, playas, parques acuáticos… Son muchos los atractivos que puedes encontrar en tu destino. Independientemente del lugar en que sea la aventura del día, más temprano que tarde te dará hambre. ¡Y allí están los snacks para salvarte!

Siempre será más caro comprar en un local o cualquier otro espacio turístico. Por eso, si está permitido, lleva unos deliciosos snacks contigo en cualquier recorrido que hagas.

Así lograrás ahorrar en comida y dejarás a un lado esos gastos hormiga que, al final del viaje, se han llevado una buena parte de nuestros presupuestos.

5. ¡Siempre lleva agua contigo!

El agua es vida, salud, energía y, durante los viajes, una mano amiga para el ahorro.

¿No has notado que mientras viajas caminas mucho más de lo normal? Además, pasas más tiempo expuest@ al sol o en la calle. Esto puede hacer que, sin darnos cuenta, gastemos más de lo que podemos en bebidas como gaseosas, energizantes o botellas de agua.

Por eso, antes de salir del hotel o de la cabaña arrendada, lleva contigo agua, preferiblemente en un recipiente térmico, para que se mantenga fresca.

Así, siempre que tengas sed, no deberás sacar dinero de tu bolsillo y podrás destinarlo únicamente para disfrute, compra de souvenirs y otras cosas de tu interés.

6. Jamás compres sin ver los precios

Hay que reconocerlo: cuando viajamos, a veces estamos un poco distraídos. 

En ocasiones, nos sentamos en un restaurante o lugar a comer y, estamos tan maravillados con el entorno y el ambiente festivo, que ni siquiera nos detenemos a ver el menú y sus precios. Luego, al momento de pagar, nos lamentamos.

Por eso, no puedes dejar a un lado este consejo: antes de comprar u ordenar, ve muy bien los precios y tómate suficiente tiempo para pensar qué está y qué no dentro de tu presupuesto.

Lleva los precios a tu moneda local o al dólar estadounidense para que tengas una referencia más clara, o compáralos con otras cosas o comidas que ya hayas comprado en tu destino.

7. En general, haz un presupuesto, ¡y cúmplelo! 

Puede parecer un consejo cliché, pero es que, ¡siempre lo olvidamos!

Si queremos ahorrar en comida o en cualquier otra cosa, necesitamos un presupuesto y, por supuesto, cumplirlo.

Dentro de tu planificación general del viaje, ten un apartado para la comida y define cuánto es el límite que puedes gastar. 

Toma en cuenta el costo de vida del lugar, los días de estadía y el tipo de alimentación que deseas llevar para hacerlo con precisión y coherencia.

¡Genial! Ya conoces 7 valiosos consejos para ahorrar en comida mientras viajas. Como ves, es difícil, ¡pero no imposible!

Si cumples este objetivo, tendrás más dinero disponible para paseos, compras, atractivos turísticos y demás. 

Y ahora que tienes en tus manos estos valiosos tips, queremos ayudarte a que no corras riesgos y ahorres al comprar pasajes, así que te invitamos a que también leas el siguiente post de nuestro blog:

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