¿Sabías que viajar es bueno para la salud? 5 razones científicas de esta afirmación
Cultura general, estilo de vida, aventura… Son muchos los motivos que nos impulsan a conocer nuevos destinos, aunque a veces olvidamos uno de los más importantes: ¡viajar es bueno para la salud!
Cuando se planifica un viaje hay una preparación en la que el cerebro comienza a trabajar en función del logro de una meta: disfrutar. Es importante que la experiencia sea placentera y en cierta medida depende mucho de ti.
Así que vive la experiencia de hacer maletas, tomar un vuelo y conocer un destino que quizás te cambie la vida. ¿Quieres saber por qué viajar es bueno para la salud? ¡Sigue leyendo!
¿Por qué viajar es bueno para la salud?
Esto se debe a que nuestra mente, emociones y organismo en general experimenta muchas cosas positivas al momento de viajar, como:
1. Menor estrés
Este primer beneficio es explicado en un trabajo de científicos de Arizona, en Estados Unidos, quienes consideran que el viajar está asociado a la búsqueda de una buena calidad de vida.
Dan como ejemplo el caso de las mujeres que suelen tomarse vacaciones y cómo eso las ayuda a estar menos tensas, cansadas y deprimidas.
Pero la relación del estrés con los viajes se extiende a todos aquellos que llevan una vida rutinaria en la ciudad. Salir de ese ciclo diario y de los espacios que siempre frecuentamos, como la oficina y el camino al trabajo, permite bajar los niveles de tensión emocional.
Es importante aclarar que también existe un estrés generado por la organización de un viaje, por lo que es fundamental tener una planificación oportuna y que las complicaciones no superen el disfrute.
2. Un cerebro distinto
La Sociedad Española de Neurología (SEN) explica que el cerebro tiene que ser entrenado para que genere nuevas neuronas.
Y es precisamente el cerebro el que agradecerá todo ese “movimiento”. Estimular la producción de neuronas es fundamental y, por suerte, viajar nos ayuda a lograrlo.
Cada vez que vas a un destino distinto existe novedad, variedad y desafío, tres elementos indispensables para que el cerebro se mantenga activo. Los científicos creen que el viajar es un entrenamiento acelerado para la mente.
Así que el adaptarse a otro espacio, rutas, olores, sabores y hasta intentar hablar otro idioma son ejercicios ideales para la actividad cerebral. Es más, sirve para reforzar el lado creativo y ayuda a mejorar a personas con enfermedades neurológicas.
3. Corazón fortalecido
Transamérica Center fue la encargada de hacer una investigación en la que se determinó que viajar es bueno para la salud, pero sobre todo es beneficioso para el corazón. Existe una relación positiva entre salir de vacaciones y este órgano vital.
Los hombres que suelen viajar tienen 21% menos probabilidad de sufrir un ataque al miocardio (el tejido muscular del corazón). Esto se debe a la capacidad de bajar la presión arterial durante el disfrute de las vacaciones.
Una Universidad de Finlandia también determinó que viajar también está asociado al mejoramiento de la movilidad corporal. Esto gracias a la actividad social colectiva que se emplea cuando se conoce un lugar distinto.
Cuando se viaja se deja de lado la vida rutinaria y sedentaria. Depende mucho del viajero disponerse a conocer ese destino que eligió para sus vacaciones y así poner energía en caminar y hacer actividades que implican movimiento.
También hay beneficios para la autoestima, así que no dudes en seguir leyendo los siguientes puntos de este artículo.
4. Quererse más
Cada vez que se viaja se imponen algunos retos personales que, la mayoría de las veces, son cumplidos favorablemente. Y ese proceso se debe al querer descubrir el sitio que escogimos para vacacionar.
Relacionarse con personas distintas, con lugares exóticos, con rutas desconocidas e incluso con un idioma diferente es un proceso que amerita la resolución de muchos problemas. Solucionarlos y de manera placentera significa ganancia para nuestra autoestima.
Sentirte capaz de interactuar con un entorno que te es ajeno y buscar recursos para resolver los inconvenientes es importante para sumar habilidades. Además, te permite vivir experiencias que se convertirán en recuerdos para compartir, lo que te dará razones para mejorar tus relaciones sociales.
Viajar es bueno para la salud porque te crea nuevas conductas que te permitirán un mejor desarrollo personal. A continuación te hablamos de ellas.
5. Afrontar problemas
El médico canadiense Mel Borins publicó en el año 2000 el libro “Vete lejos solo por lo saludable que es” y allí habla sobre la capacidad de descubrir en los viajes nuevos puntos de vista para solucionar problemas.
Si has escuchado eso de que las vacaciones son sanadoras y te ayudan a tomar decisiones, eso es muy cierto. Cuando estás en un lugar que no conoces creas estrategias para cumplir con el itinerario y conoces formas distintas de llevar la cotidianidad.
Todo esto te lleva a un bienestar emocional que te permite ver de forma más objetiva todo lo que tienes en casa e incluso te lleva a entender que afuera de tus fronteras hay formas distintas de afrontar la vida.
Realmente viajar se trata de ser feliz. No solo es comprar cosas y visitar lugares para una foto. Es acumular recuerdos, sentir la experiencia y cumplir sueños. Al final, sumarás muchos más beneficios que preocupaciones.
Entonces, ¿Qué esperas para reservar ya unos boletos de avión y un hotel?
Eso sí, recuerda afrontar tu próxima aventura con mucho entusiasmo y planificación, para que no se convierta en un estrés al final del día.
Empieza a preparar todo con tiempo, piensa en la compañía ideal y mantén una actitud positiva de principio a fin.
¡A volar!
¿Te pareció interesante la información que encontraste en este artículo? Si te gustó este contenido para viajeros, estás en el lugar correcto. Suscríbete a nuestro newsletter para que recibas mucha más información.