¿Cuál es la mejor época para viajar a Mendoza?
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¿Cuál es la mejor época para viajar a Mendoza?

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Para viajar a Mendoza, es necesario tomar en cuenta un punto de suma importancia: El clima. Aunquees una provincia de temporadas climáticas muy distinguidas, hay picos durante el verano en el que hace muchísimo calor; mientras que durante el invierno, el frío hace de las suyas, descendiendo las temperaturas drásticamente en ciertos momentos.

Para asegurarte de ir en el mejor momento de la estación ideal, es necesario conocer un poco sobre cada una. Por eso, en este artículo, te mostraremos las ventajas, cualidades y diferentes actividades que puedes hacer en ellas. Así, podremos determinar cuál es la mejor época para viajar a Mendoza.

¿Qué hacer en cada una de las temporadas en Mendoza?

Como verás a continuación, cada temporada tiene actividades recreativas y deportivas propias de sus condiciones climáticas. Y aunque son muy diferentes una de la otra, todas tienen un punto en común: ¡Lo importante es disfrutarlas!

Verano

Esta temporada empieza el 21 de diciembre y termina el 21 de marzo.

Tal como te lo mencionamos en la introducción, el verano en Mendoza es realmente caliente. Su temperatura promedio se puntúa en los 27 °C. Igualmente, no es extraño cuando oscilan entre los 30 y 35 grados centígrados.

Las lluvias, por su parte, no son frecuentes en Mendoza, pero, las pocas que se dan, suelen hacer acto de presencia en esta temporada. No perduran mucho tiempo, y aparecen y desaparecen de forma repentina.

Debido a esto, las actividades recomendadas y preferidas por los turistas y locales, son recreaciones como el rafting y kayak, donde pueden divertirse con la creciente cantidad de agua de los ríos. Así como cabalgar, andar en bicicleta y caminar para aprovechar los senderos despejados.

Claro que, si vas a viajar a Mendoza durante el verano, específicamente entre el 26 de febrero y el 6 de marzo, no puedes perderte la Fiesta de la Vendimia: una tradición propia de Mendoza, donde se celebra todo el trabajo y esfuerzo hecho por las personas encargadas de producir su tan famoso vino.

Además, como todo buen visitante, debes aprovechar el verano como una de las mejores épocas para conocer las bodegas y viñedos, a razón de la abundante cosecha de uvas durante esos meses.

Otoño

En cuanto al clima, el otoño es la temporada perfecta para quienes prefieren evitar temperaturas muy altas, así como otras muy bajas. En general, no suben de 16 °C ni descienden de 11 °C. El ambiente se mantiene un poco frío, sin llegar a ser molesto.

Empieza el 21 de marzo y finaliza el 21 de junio. A mediados de estos tres meses, verás las hojas todavía en los árboles en colores amarillos y anaranjados, mientras otras ya están en el suelo. Se pinta como un escenario tan hermoso, que hasta tiene su propia canción: Otoño en Mendoza, de Don Torres.

Durante esta temporada también es bastante común visitar los viñedos y bodegas, donde empiezan con la recolección de uvas.

Debido a la belleza del paisaje en estos meses, predominan las caminatas por senderos de árboles y las visitas a parques o áreas protegidas, donde para disfrutar, basta con admirar el entorno.

Si ya tienes suficiente inspiración y quieres irte por algo más atrevido, aún puedes optar por los ya mencionados kayak y rafting, así como recorridos en montañas y cabalgatas ¡El tipo de experiencias que debes vivir por lo menos una vez!

Invierno

¡El tan esperado invierno! Amado por muchos y odiado por otros. Comienza el 21 de junio y tiene fin el 21 de septiembre. A lo largo de estos meses, las temperaturas no van más allá de los 15 °C, ni a menos de 1 °C. Aunque, en algunas noches, puede descender a menos de 0°.

Y si te preguntabas, si cae nieve, ¡la respuesta es afirmativa! De hecho, es tan abundante como para que las actividades más frecuentes en esta estación sean el esquí, los paseos en trineos y el snowboard. En definitiva, el invierno en Mendoza nada tiene que ver con el aburrimiento.

¿Y si te abruma el frío? No pasa nada. Será la oportunidad perfecta para aprovechar las aguas termales a lo largo de la provincia. Una de ellas, por cierto, llamada Termas de Cacheuta, se asemeja más a un parque, gracias a sus toboganes, pileta de natación, piscina de olas, cascadas, entre otros.

Primavera

La primavera no se mantiene tan caliente como el verano, pero tampoco tan fresca como el otoño. De hecho, el cambio de temperatura de invierno a primavera es brusco, pudiendo llegar incluso a 30 °C durante el día y 14 °C a horas de la noche.

Comienza el 21 de septiembre y finaliza el 21 de diciembre, para darle paso al verano.

En esta época, regresan los deportes acuáticos por la mayor afluencia de agua en los ríos, motivada por el deshielo.

Se trata de una temporada muy hermosa a la vista, donde puedes ver varias montañas que siguen pintadas con la nieve y otras totalmente verdes, junto con el ansiado “renacimiento” de los árboles y las flores.

Lo usual en primavera es disfrutar de su belleza, haciendo caminatas, cabalgatas, recorridos por parques, excursiones, entre otros. Las actividades de verano y otoño, podemos repetirlas en la primavera, pero con otro clima y paisaje.

Además, ¿qué tal aprovechar el clima más fresco de las noches?, y hacer una, o varias, escapadas nocturnas a las plazas, bares o a vinotecas.

Puedes estar seguro de que en Mendoza te diviertes tanto a la luz del sol, como a la luz de la luna.

¿Cuál es la mejor época para viajar a Mendoza?

Si quieres disfrutar de la mayor cantidad posible de actividades sin sufrir por frío o por calor, te recomendamos viajar a Mendoza en otoño o primavera. Son estaciones en las que, además, encontrarás hospedaje y actividades a mejores precios, debido a que las temporadas altas son en verano e invierno.

Desde luego, si quieres disfrutar de las fiestas y el sol del verano o de la nieve en invierno, ¡no lo pienses dos veces! El momento ideal lo decides tú.

Una gran idea es comenzar por evaluar nuestros precios, itinerarios y destinos, para asegurarte de gozar tu viaje desde el momento en que pongas un pie en el avión.